Mí Vuelta Por El Mundo

Un día más de lluvia… En fin,  hemos logrado dar un paseo entre los arbustos semejantes a los de Escocia antes de dirigirnos a Turangi, donde el tiempo cambió y hemos podido hacer una hermosa caminata – Synco tenías razón….- finalizando con una terápia de ronronéo para Ariana… Seguro que si el gato no le hubiese hablado.. lo siguiente no hubiese pasado…. No hos inquietéis, ella no está completamente loca, simplemente le faltan sus gatos …;)     

Al día siguiente ha llovido el día entero…. Hemos parado en Taihape y le dimos en todo, encontramos una  excelente cafetería, Soul Food Café: muy buen desayuno inglés – si, si han leido bien… buena música, buenas tortas, gente simpatica y acceso al internet gratuito!!!!  Y aunque ésto les parezca un chiste, hemos estado en el centro de la capital mundial de la bota de goma….:)

Por suerte al anochecer salió el sol a la vista y hemos podido hacer una caminata en Ohakune y percibir por primera y única vez la Cumbre del Pico Ruapehu, antes de echarnos a una cena con calabaza hecha en una mesa de camping:)  

Lunes- tempranísimo. Hemos puesto el despertador en las vacaciones! Salimos de la casa de los padres de David con rumbo hacia el Monte Bruce, reserva de aves, para ver por fin a los Kiwis. Tranqui.. Gregoire! Están protegidos y no se pueden comer. Ariana andaba un poco con disgusto.. el tiempo malo..lloviendo. En NZ se dice que si el tiempo no te agrada, espera un poco.. Pero nosotras seguimos viaje a una de las grandes ciudades del país: Palmesrton Norte .. Con un poco de dudas, despues de haber leido lo que John Cleese dice sobre la ciudad en el Lonely Planet:

“Si siempre te has querido suicidar,   pero te faltó el coraje,  pienso que una visita a Palmerton North te daría el coraje necesario para llevarlo a cabo por fin.”

Hablando en serio,- habrá algunos que ciertamente lo tomen en serio, yo núnca pensé suicidarme, pero en ésta ciudad hubiese querido suicidar a alguien, porque en esa gran ciudad  fue imposible encontrar un acceso al internet! Bueno, no estábamos en la ciudad de la bota de goma, … a seguir en el próximo número…     

Llegando a Wellington, me he conectado con David: lo había conocido en Dublin- más de 7 años antes – con mi amiga Wafaa mientras habíamos ido los festejos de  San Patricio, y más tarde lo albergué una o dos noches en Boulogne -sur- Mer  mientras él viajaba por Europa.

Ariana y yo fuimos invitadas gentilmente a hospedarnos en la casa de sus padres, donde él y su mujer Tessa con su adorable hijita Frances viven actualmente, mientras esperan la entrega de su propia casa nueva.  Hemos pasado una bella tarde en la playa, seguido por un barbecue  donde hemos conocido  algunos de sus amigos que nos han enganchado un itinerario hasta Auckland. MIL GRACIAS por todo!! Los esperamos al pié de la letra en Europa.           

Hemos llegado justo a tiempo para tomar el ferry de las 14 hs entre Picton y Wellington. .. Un poco más de 3 hs de viaje entre la Isla del Sur y la del Norte.  

Es cansador observar las estrellas durante toda la noche. A la mañana siguiente optamos por pasar una jornada tranquila. Desayuno en los fiordos, frente al mar, mirando los pájaros.  Las vacaciones tambien cansan!

Paseo a Puente Pelarus, volver a la infancia… Sueño en pleno bosque y después un desayuno en un camping donde nos topamos con una pareja jubilada de Estados Unidos que se encuentra en un viaje de un año por el mundo! Llegaron desde México – via Islas Marquesas ha NZ en su propio velero, que han vendido al llegar comprando un vehículo completo – Después fuimos a hacer una caminata de dos horas, simplemente porque habíamos decidido ir hasta la cima de la montaña y regresar después de una bella pausa. Ariana se planchó sobre la playa y yo me lancé al agua… (Mamá, lo hubieses adorado, al lugar!)

Después de ésta jornada paramos para una comida vegetariana antes de regresar al vehículo en busca de un lindo lugar para pasar la noche mirando  la Via Láctea.      

   La Ruta del Paso Lewis con su bella vista hacia los campos circundantes me hizo acordar a algo ya visto. Ha sido muy lindo pero tenia el aire compacto de Francia, Austria, Suiza o Croacia, con sus rutas y bosques canadienses  y puentes de una sóla mano, donde la ruta disminuía hasta ser tan sólo una linea. Nos cruzamos tambien con un granjero que con sus hijos iba detrás de las vacas – muy divertido! – y hemos visto tambien diversas pequeñas ciudades típicas de NZ ( bueno, no son comparables a ningunas de otros lugares….) No se puede describir, por eso vean Ustedes mismos las fotos!!                                 

      Después de éste bellísimo comienzo, llegamos a Kaikoura. Ansiosas por ver las ballenas preguntamos en la Oficina de Turismo donde se podían avistar, pero nos dijeron que durante los dos últimos días no fueron vistas cerca de la costa. Así salimos a caminar por un rato y resultaron ser 6 horas al final- Gregorio … sin comentario, pasando a saludar a los pingüinos, leones marinos y las focas.   Hay alguien que me puede aclarar la diferencia entre leones marinos y focas?  y los pájaros. Ha sido un día estupendo y un verdadero regalo.

Al regresar en vano hemos tratado de conseguir un permiso para acampar, porque la oficina estaba cerrada…. Después de un pequeño bacado, salimos de viaje al Paso Lewis , donde hicimos una pausa para pernoctar.     

Por fin logramos salir de Christchurch – es muy largo de explicar! Digamos tan solo que uno núnca supo si ya estaba fuera o aún en la ciudad en cuestión… - he hicimos un alto en Cheviot para cenar – es una de las ciudades más grandes de la zona ( el tamaño de las ciudades en NZ se deducen a lo largo de una calle de paso, imaginen el tamaño de las mismas…. pero en éste caso es realmente una ciudad con varias casas, 2 restaurantes- de los cuales  uno estaba cerrado y el abierto cerraba a las 22 hs…. y donde pudimos adquirir el permiso barato  para acampar por la noche nuestro vehículo  justo al costado del bar – restaurante.  Ariana estaba encantada de encontrar algunos gatos caminando por ahí a la mañana siguiente y los invitó a nuestro primer desayuno al sol en éste viaje que emprendemos juntas.